jueves, noviembre 13

La margarita dijo no.

La idea nació hace mucho. Hace más de 7 años talvez. Primero surgió en papel. Luego donde se pudiera. Y ahora aqui. Siempre de noche, rara vez con luz de día. Excepto cuando amanece y se siente mucho frio. Y fue algo asi.

Inspirado por una margarita, sin saberlo aún, papel en mano me sentaba todas las tardes, con las piernas estiradas y un decadente walkman, que fue mi bien mas preciado durante muchos años, que me permitia olvidar tanto ruido mundano. Tenia ganas de decir, pero no encontraba a quien, pero eso si, nunca por falta de qué.


Tenia solo 17 años y tarde tras tarde, cogia mi eterna polera gris, mi lapiz tan mordido y desgastado, cualquier papel que sirviera y con eso bastaba. Sentia tantas cosas y a la vez no concluia en nada. Coincidi con una extraña etapa de soledad en mi vida, que solo paso esa vez, nunca antes, ni nunca despues.


Pero descubrí que el asunto era este: Yo te esperaba tarde tras tarde. Me encantaba que me sorprendieras con un abrazo o que me cubrieras los ojos con tus manos suaves y frias. Era indescriptible sentir tu compañia, que te sientes a mi lado, que de pronto invadieras mi silencio y comezaras a contarme tu día desde que pusiste un pie afuera de tu cama hasta el momento en el que bajaste del colectivo, cinco cuadras antes de tu parada.
Yo era el tímido de los tímidos, el más monse del grupo. El papanatas, el que pasaba desapercibido, el primero en apellidarse con C, el que era disque feliz en sus cuatro paredes, el que cumplía sus tareas, al que le llegaba todo y todos (esto último no ha variado mucho), el que odiaba las camisas arrugadas y la corbatas torcidas, el que tenia la mejor caligrafía, el más puntual de todos, el engreido del auxiliar, ja, si que lo disfrutaba, hasta que de pronto... tu voz ruidosa y estridente retumbo lo mas profundo de mi introversión. "Vienes a mi casa a las 6 y te doy el libro". Mierda -exclamé-. ¿Será que la profesora esta tramando joderme la vida?, pense. Como se le ocurre enviarme a la casa de alguien que no conozco, que en un año no le mencione ni un hola. Como hago, como la busco, ¿y si no esta?, ¿y si me hace esperar?, ¿y si sale su papá?. Que drama ¿no?, pero en fin, aprete los... y caminé. Seis en punto, parado frente al timbre, "¿Quien es?"-gritaron desde adentro- y con más ganas de largarme que de quedarme... -Porfavor se encuentra-... Si, un momentito... Uff-resople-.
Asi comenzó, asi me hizo hablar, con sus amigos, con los amigos de sus amigos, asi pude embriagarme el último día de clases, asi pude empezar a disfrutar mi vida, asi me hizo ser yo mismo, me dio seguridad, llenó de ruido mi silencio, todos los días, durante dos años ininterrumpidos, asi logró que me descubra. La última vez que fuimos un par de amigos sencillos, sentados hablando de nada, se paro depronto, cogió una margarita del jardin y me dijo: ya no puedo estar mas junto a ti.
No se bien que sucedió dentro de ella. No se porque despues de ese momento se marchó. Hace unos meses la volvi a ver, extrañé tanto esas tardes. Ahora ya nada es igual. Pero hay tanto que no voy a olvidar, sobretodo esto, el poder decir lo que siento sin miedo, se que aún me enrredo, que me cuesta ordenar los pensamientos, los sentimientos, pero vaya, me hizo ser yo. Ahora puedo sentarme aqui sin temor a que diran de mis palabras, eso ya no me importa, ya se quien soy... y nunca olvidare eso.

1 comentario:

Unknown dijo...

asi q ella es la culpable de q seas asi....mmm.......pues cuando me la presntas para agradecerle...XD..pues no me imagino ati too calladito.. con temor a hablar... noooo...ese no eres tu.... y si la margarita te dijo no...sabs q siempere tendras un jardin de amigas a tu lado...
EdItH...